04 Dic ¿POR QUÉ ES IMPORTANTE EL AUTODIÁLOGO POSITIVO?
La autocomunicación, el diálogo interno con uno mismo o el autodiálogo son conceptos que se refieren a lo mismo, a cómo nos hablamos a nosotros mismos. Seguro que alguna vez te has encontrado diciéndote a ti misma/o: “mira que eres tonta/o” o “todo lo haces mal”. Esto es parte del autodiálogo interno que tenemos con nosotros mismos y, como podrás apreciar, en este caso es negativo y puede tener graves consecuencias en nuestra autoestima.
Por ello, en la entrada de hoy vamos a hablar sobre qué es el autodiálogo, qué tipos hay, qué consecuencias tiene y cómo nos afecta a la autoestima.
¿Qué es el autodiálogo? ¿Qué tipos existen?
Previamente a explicar lo que es el autodiálogo vamos a comentar unos conceptos previos.
Antes de nada, me gustaría explicaros lo que son los eventos cognitivos. Estos son pensamientos o imágenes que pasan constantemente por nuestra cabeza y a los que, por lo general, no prestamos atención. Pueden ser: pensamientos automáticos, diálogo interno, autodiálogo, etc. Todos los anteriores están asociados a síntomas de sufrimiento emocional. Por lo que podríamos decir que el autodiálogo es un tipo de evento cognitivo.
Ahora que tenemos claro esto vamos a explicar qué es el autodiálogo. Hay muchas personas que han intentado definirlo, para mí la definición más simple y clara es la siguiente:
“El diálogo o las conversaciones que cada persona tiene consigo misma. Este diálogo interno hace que dirijamos nuestras actuaciones y puede tener implicaciones en nuestra autoestima o en nuestro sufrimiento emocional”.
Es importante destacar que esta autocomunicación puede ser positiva o negativa. Pongamos un ejemplo, imagínate que estás cocinando la cena y esta cena se te quema. Puedes tener los siguientes autodiálogos:
- Positivo. No pasa nada, a todo el mundo le puede pasar. Lo mejor será que pidas algo para cenar, ya que no te da tiempo a cocinar.
- Negativo. Ya te vale, parece que eres tonta. Siempre se te está quemando todo, eres lo peor. Encima ahora no hay tiempo de volver a empezar.
Como podemos ver, ante una misma situación, la conversación que tengamos con nosotros mismos puede ser totalmente diferente. Por un lado, la persona con autodiálogo positivo hace una evaluación racional de la situación e intenta aportar soluciones al problema. Por otro lado, la persona con autodiálogo negativo, probablemente, hace una evaluación irracional de la situación y es víctima de diferentes sesgos cognitivos, etc. Además, no aporta ninguna solución. Por lo que, podríamos decir que, en este caso, el autodiálogo negativo contribuye a un sufrimiento emocional mientras que el positivo no lo hace.
¿Qué consecuencias tiene el autodiálogo negativo?
Como hemos comentado, el positivo es bueno para la supervivencia y nos ayuda a afrontar las situaciones y la vida de una manera satisfactoria. Sin embargo, el negativo no. Por ello, vamos a comentar qué posibles consecuencias puede tener el autodiálogo negativo:
- Ansiedad. Siguiendo con el ejemplo anterior, el autodiálogo negativo genera ansiedad, entre otras cosas, porque no se hace una correcta evaluación de la situación.
- Depresión. Hablarse de manera negativa constantemente genera sentimientos de tristeza, poca eficacia, etc.
- Pesimismo. Tener constantemente este tipo de pensamientos hará que afrontemos la vida con cierto pesimismo y desesperanza hacia el futuro.
- Culpa. Si reparamos en el ejemplo anterior, nos daremos cuenta de que la persona que tiene un diálogo interno negativo se culpabiliza de la situación, mientras que la persona que piensa de manera positiva no. Los sentimientos de culpa constantes son algo comunes en estas personas.
- Baja autoestima. Como comentaremos en el siguiente apartado, puede tener graves consecuencias en la autoestima.
Además, si no se trabaja en conseguir un autodiálogo positivo se pueden producir graves trastornos de ansiedad o depresión.
¿Qué relación existe entre el autodiálogo y la autoestima?
El cómo nos hablamos es fundamental a la hora de construir nuestra autoestima. A continuación, mencionamos las consecuencias para ambos tipos de autodiálogo:
- Positivo. Las personas con este tipo de autoconversación suelen tener una buena autoestima. Al fin y al cabo, son personas que se estiman y que no se suelen echar la culpa de situaciones en las que no son culpables. Además, son bastante racionales. Todo esto contribuye a tener unos niveles saludables de autoestima.
- Negativo. Podríamos decir que es todo lo contrario a lo anterior. Las personas que se hablan mal a sí mismas no suelen quererse nada, en parte, porque se sienten culpables de todas las malas situaciones que viven, tienen ansiedad constantemente, sienten vergüenza de sí mismos, etc. Todo esto da lugar a tener niveles bajos de autoestima.
Como podemos apreciar, la autoestima está estrechamente ligada con el autodiálogo que tenemos con nosotros mismos.
¿Qué podemos hacer para mejorar el diálogo interno con nosotros mismos?
Si has identificado que tienes un autodiálogo negativo, estaría bien que tuvieras en cuenta los siguientes consejos:
- Haz una buena evaluación de la realidad. Cuando existe un diálogo interno negativo muchas veces la evaluación que se hace de la realidad no es correcta y, como comentaremos en los siguientes dos puntos, no tenemos en cuenta los factores externos y las interpretaciones erróneas que podemos hacer de la realidad.
- Ten en cuenta los sesgos cognitivos y los pensamientos irracionales.
- Ten en cuenta los factores externos. No siempre todo depende de nosotros y, en muchas ocasiones, hay factores externos asociados, tenlos en cuenta.
- Piensa en las consecuencias del diálogo interno negativo. Reflexionar sobre lo malo que es hablarse de forma negativa puede servirnos como fuente de motivación para iniciar los cambios.
- Cuídate. Dedícate tiempo a ti misma/o y haz actividades que te resulten placenteras.
- Practica la reestructuración cognitiva. Debate contigo mismo todos aquellos pensamientos negativos que tengas sobre tu persona. Busca interpretaciones alternativas.
Asimismo, hay muchas otras cosas que podemos hacer. Sin embargo, estas me han parecido las más importantes.
Conclusiones
La manera que tenemos de hablarnos a nosotros mismos es muy relevante e influye mucho en nuestra felicidad o infelicidad. Es tan valioso que incluso lo utilizan para gestionar la ansiedad y el estrés y tener mejores rendimientos en diferentes deportes (Barahona-Fuentes et al., 2018).